REFLEXIÓN DEL DOMINGO XXIX ORDINARIO
ORAR SIEMPRE
Ex 17, 8-13; Sal
120; 2 Tim 3, 14-4, 2; Lc 18, 1-8
XXIX domingo
ordinario, ciclo c
16 de octubre de
2016
Pbro. Gilberto Lorenzana González
Formador en el seminario
Diócesis de Tuxpan
Los
apóstoles le han solicitado a Jesús que les aumente la fe porque las exigencias
para seguirlo son muchas; aunado a una fe sólida, ahora Jesús nos educa en la
necesidad de orar siempre, no sólo para vivir en la justicia sino esperar con
fe, a través de la oración, la llegada del Hijo del hombre.
1.
Orar
cómo Jesús.
La
oración para Jesús es algo habitual, pero cuando se va a enfrentar con momentos
decisivos, su oración es con mayor intensidad.
En el evangelio de Lucas se destaca la oración de Jesús al Padre, como
una necesidad de estar en comunicación, a través del amor. El testimonio orante
de Jesús va suscitando en los discípulos el deseo de aprender a orar y les
enseña la oración bellísima del Padre Nuestro.
De
tal manera que los discípulos deben de orar siempre y por eso relató la
parábola del amigo importuno (ver Lc 11,5-8) y del juez injusto (ver Lc 18,1-8).
2.
¿Qué
es orar?
- Es un impulso del corazón, una mirada lanzada hacia el cielo… (santa Teresita del Niño Jesús).
- Es elevación del alma a Dios o la petición a Dios de bienes convenientes (San Juan Damasceno).
3.
Orar
siempre.
Orar
siempre o sin desfallecer no está indicando una oración continua, sino que se
trata de una oración con fe o dicho de otra manera el motor de la oración sin
desfallecer es la fidelidad a Jesús, hasta que venga.
En
todo tiempo, lugar, momento, bajo todas las circunstancias hay que orar para
que venga el hijo del hombre, aun cuando parece ser que la oración no es
escuchada, sobre todo cuando el cansancio, la rutina, el hastío, la
incredulidad, fatiga y otras situaciones adversas se vayan presentando en el
caminar.
La
oración proviene de todo el hombre, es decir gestos, posturas, palabras,
silencios… y se ora desde el corazón, si éste está alejado de Dios, la
expresión de la oración es vana. El corazón es mi morada, es donde yo estoy, es
lugar de decisión, es el lugar de la verdad y es el lugar del encuentro entre
lo humano y lo divino.
- Una fuente para orar siempre es la Palabra de Dios.
- La creación es una búsqueda constante para orar y encontrarse con Dios.
Así, la vida de oración es estar habitualmente en la presencia de Dios y estar en comunión con Él. Y estando en comunión con Él todo bien se puede obtener.
4.
Orar
hasta que venga el Hijo del Hombre.
Es
un hecho de que Jesús ya vino (encarnación) y vendrá de nuevo, pero mientras la
venida del Hijo del hombre se hace esperar, los discípulos del Señor están
padeciendo los estragos del mundo, como son: persecuciones, violencia,
injusticias, amenazas, miseria…
Para
que su llegada sea pronto y haga justicia, es indispensable una vida de
penitencia, una vida de oración perseverante y con fe. Jesús mismo ha enseñado a
implorar que venga su reino en la oración del Padre Nuestro.
Dios,
sin tardar, hará justicia a sus escogidos. Esto explica el sentido de la
sentencia final: ¿encontrará fe? Por una parte, la fuerza de la oración estriba
en la fe; por otra, el tiempo de la justicia divina será el segundo
advenimiento de Cristo. Pregunta, pues, el Maestro: cuando venga el Hijo del
hombre, que será el tiempo de hacer justicia, ¿serán muchos los que, como la
mujer de la parábola, clamen a Dios con fe pidiendo justicia contra sus
injustos opresores?
“Padre de misericordia,
que has puesto a este
pueblo tuyo
bajo la especial
protección
de la siempre Virgen
María de Guadalupe, Madre de tu Hijo
concédenos por su
intercesión,
profundizar en nuestra fe
y buscar el progreso de
nuestra patria
por caminos de justicia y
de paz.
Por Jesucristo, nuestro
Señor. Amén”
(Misal
romano, oración colecta de la misa de la solemnidad de Santa María de
Guadalupe)
Nos cuestionamos:
¿Crees
firmemente en los bienes que se obtiene por medio de la oración? ¿Haces oración
o rezas? ¿Con que frecuencias haces oración? ¿Has buscado alguna capacitación
para aprender a orar? ¿Has promovido la oración o bloqueas las iniciativas para
orar? ¿Tu oración es con fe? ¿Has orado
por la paz y la justicia en nuestro País?
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